En enero de 2020 volvieron a saltar las alarmas en el Asilo Nuestra Señora de los Ángeles. Abanca interpuso una demanda de ejecución del crédito hipotecario. En esta demanda se reclamaban unos 367.000 euros, más intereses y costas judiciales. Ahora, una sentencia del Juzgado de Primera Instancia nº18 de Málaga ha dictado un auto que desestima la solicitud de dicha ejecución hipotecaria.

Aunque no es firme y cabe recurso ante la Audiencia Provincial de Málaga, supone la paralización por el momento de un proceso del que dependía la permanencia de esta residencia que lleva más de quinientos años de presencia en Málaga y de labor asistencial con las personas mayores y más desfavorecidas.



“La única defensa fueron las cláusulas abusivas que abundan en el contrato de préstamo hipotecario, redactado en los años 2006-2007, entre ellas la cláusula suelo, también intereses de demora del 18%”, explica el abogado Jesús Andrés Rodríguez.

“El préstamo no puede reclamarse por el importe que el banco quiere, Abanca tiene que hacer un nuevo cálculo del préstamo eliminando la cláusulas abusivas”, agrega el abogado y defiende que el Asilo “quiere pagar lo que tiene que pagar, pero no más de lo que deba, pero el banco se ha negado a alcanzar un acuerdo en esos términos”.

Rodríguez reitera que nunca han buscado un trato de favor sino que se apliquen las reglas generales propias de este tipo de entidades sin ánimo de lucro y con un fin social. También subraya que “el interés del asilo es alcanzar un acuerdo con el banco para poder abonar lo que debe, pero de forma pactada y negociada, no imponiendo cláusulas que jurídicamente ya se saben que son abusivas”.

Ahora mismo las medidas de embargo quedan en suspenso hasta la firmeza de esta resolución. “La prioridad es atender a los mayores con tal efectividad que es de las pocas residencias que por el momento están libres de Covid, están centrados en hacer su trabajo de la mejor manera posible y lo están consiguiendo”, concluye el abogado.

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