Málaga despide un fin de semana en el que ha reinado el buen tiempo, aprovechado por muchos para reencontrarse con la playa. Los termómetros han llegado en varios puntos de la provincia, como la capital de la Costa del Sol, Ronda y Vélez-Málaga, a los 22 grados. No parece, en cualquier caso, que esta situación se alargue mucho más. 

De hecho, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), desde el arranque de la semana las lluvias pueden hacer acto de presencia en algunas zonas del interior. En concreto, para mañana se prevén cielos nubosos con precipitaciones a partir de la tarde en el interior y litoral más occidental, en general débiles, pudiendo ser algo más intensas en las sierras occidentales. Las temperaturas máximas caerán en el interior.

La inestabilidad irá a más conforme avance la semana. De cumplirse lo apuntado en su web por Aemet, el miércoles la lluvia volverá a hacer acto de presencia en buena parte de la provincia, aunque no se espera que sean de gran intensidad. Y a casi una semana vista, también se maneja la idea de que el sábado que viene entre un frente atlántico que puede dejar nubosidad abundante y precipitaciones en Málaga.

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