El delegado municipal de Seguridad Ciudadana, Juan Carlos González, ha dado a conocer las nuevas medidas que suponen que toda la provincia de Málaga haya subido al nivel 3 de alerta, incluida el Área Sanitaria Serranía y, por ende, nuestra ciudad. De esta manera, a partir de la pasada media noche se establecen nuevas restricciones para evitar el aumento de contagios, como ha establecido el comité territorial de la Consejería de Salud y Familias, tras la reunión mantenida ayer.

Estas medidas tendrán una duración, en principio, de siete días y afectarán a aspectos como las ceremonias religiosas o civiles, los aforos y horarios en la hostelería y restauración, reuniones del ámbito privado y otras cuestiones que el concejal ha detallado. González ha señalado que la Policía Local va a hacer un seguimiento del cumplimiento de toda esta nueva normativa tras el aumento del nivel de alerta y, para ello, se ha hecho una ampliación de plantilla en activo a través de servicios extraordinarios. Especialmente se va a vigilar a los establecimientos públicos, los parques y las reuniones de personas o celebraciones de los ‘botellones’.

El delegado municipal de Seguridad ha querido recomendar el uso de la mascarilla que, aunque no varía la normativa en este sentido con el aumento del nivel de alerta, si es una herramienta para evitar el contagio, junto con el respeto de la distancia social, el lavado de mano y, sobre todo, la vacunación.

Desde la Policía Local, Miguel Aranda ha dado a conocer que el 80% de la labor actual de este cuerpo de seguridad se basa en la vigilancia del cumplimiento de toda la legislación en torno a la prevención del aumento de contagios, recordando que las nuevas medidas van a afectar especialmente a los aforos de establecimientos de hostelería, el servicio y el consumo que tendrán nuevas restricciones. Aranda ha recordado que hay establecidas unas sanciones, dependiendo del nivel de contagio que pueda conllevar la infracción, y que van desde 100 a 3.000 euros en infracciones leves; de 3.001 a 60.000 euros en las graves y de 60.001 a 600.000 euros para las muy graves. También ha insistido en la prohibición de los ‘botellones’ que se están trasladando fuera del casco urbano pero que también en estas zonas se están vigilando.

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